Temaca, el pueblo en resistencia por 16 años, dice sí al Zapotillo, pero con sus condiciones

La resistencia por casi 17 años dio frutos ayer en Temacapulín. Este poblado, junto con Acasico y Palmarejo, le demostró una vez más al Gobierno federal y al estatal en turno que no se doblega y que también tiene memoria. 

Después de que el pasado 14 de agosto, el Presidente Andrés Manuel López Obrador les hizo una propuesta para construir la Presa El Zapotillo, ayer acudió nuevamente para conocer la respuesta de los pobladores. 

En un ambiente preparado en la Plaza Principal de Temacapulín con una alfombra hecha de productos de la región, chiles de Yahualica, cacahuate y frijol, pancartas colgadas en cada casa de “No a la Presa El Zapotillo” y al grito de “Temaca Vive” lo recibieron. 

Hubo halagos y regalos como agradecimiento de cumplir su promesa de ir a la zona y escucharlos, pero también una postura firme: la propuesta del Gobierno federal no es suficiente para garantizar que no serán inundados, por eso su contrapropuesta es una presa con una altura de 80 metros, pero con un vertedor para no se llene más de la mitad, así lo dijo el representante del Comité Salvemos Temaca, Gabriel Espinoza Iñiguez. 

Pero los pobladores también tienen memoria y ante la sorpresiva visita del gobernador a su casa, a su poblado, y previo a dar conocer su decisión, lo recibieron con abucheos. 

“La medida adicional de seguridad que solicitamos al Presidente es el reacondicionamiento de la presa con un vertedor a una altura más baja que el poblado de Palmarejo. Este vertedor garantizaría la seguridad de los tres poblados, aun cuando se presenten tormentas con periodo de retorno mayor a mil años”. 

Para ellos está latente que nunca ha querido escucharlos desde que gobierna, pese a que en campaña prometió salvar a las comunidades, e incluso han tenido que acudir a tribunales a fin de conseguir un diálogo y ni así los ha atendido. 

La esperanza está puesta en el Presidente de la República y así se le hicieron saber que la propuesta de las comunidades les da la seguridad que no serán inundadas. Habla Isaura Gómez, habitante de Temacapulín. 

“Lo que queremos y le pedimos, por lo que usted más quiere en este mundo, es que la cortina de la presa quede a 40 o a 50 metros, pero que de ahí en adelante no quede nada automático, ni gente humana que se encargue, por más que crezca el río o se reviente una presa, porque muy grande que sea, no se inunden las tres comunidades”. 

La propuesta del Gobierno federal había sido un embalse a una altura de 80 metros, pero con compuertas automatizadas que se cerrarán en las lluvias y se abrirán durante el estiaje. 

Eso no fue suficiente para los pobladores y más bien su contrapropuesta también les da seguridad para que la obra no pueda modificarse en futuras administraciones. Ellos saben lo que les conviene, advirtió, Gabriel Espinoza 

Otra de sus condiciones presentadas fue el diseño de un plan de justicia para ellos, tras casi 17 años de lucha, que garantice la reparación integral del daño, pues hay al menos 20 violaciones graves a sus derechos humanos. En este se incluye que se permita el retorno de Acasico y Palmarejo con la construcción de infraestructura necesaria. Habla Luis Villegas, representante de Acasico. 

Programas de reactivación económica, de desarrollo, de apoyo al campo y la ganadería, fortalecimiento de infraestructura en las comunidades y de servicios, disculpas públicas, así como una auditoría técnica y financiera al proyecto de El Zapotillo, son parte también de este plan de justicia. 

El director de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), German Martínez Santoyo anticipaba que la propuesta sería analizada, pero luego Lopez Obrador lo confirmó. 

En un tono de apertura y disposición dijo que en un mes regresará a Temacapulín, y esa propuesta se analizará con los técnicos de la Conagua, pero además habrá presupuesto para lo que requiera. 

“Yo hago el compromiso con ustedes de que vamos a revisar la propuesta de ustedes, y considero que sería importante que continúen los técnicos reunidos, parlamentando, analizando, reflexionando sobre qué opciones, qué alternativas, y si se requiere presupuesto yo puedo garantizarlo”. 

Añadió que se diseñará ese Plan de Justicia para las comunidades, con las obras que ellos requieran y el Gobierno federal aportará el recurso para mejorar sus condiciones de vida y de trabajo. También el programa que solicitaron para una reparación integral del daño será un hecho y en su próxima visita vendrá todo su gabinete. 

“Vengo en un mes, ¿de acuerdo? En un mes firmamos aquí el programa (para poner en marcha El Zapotillo), y no sólo eso: me van a acompañar todos los miembros del gabinete. Vamos a tener la reunión del gabinete del Gobierno federal. Van a venir todos los secretarios”.

El Presidente también tuvo que intervenir para pedirle a los habitantes que en su próxima visita a Temaca sean respetuosos con el gobernador, luego de los abucheos. 

A partir de ahora, la Conagua iniciará con el análisis de esta contrapropuesta y el diseño de un Plan de Justicia para las comunidades. 

Lo que aún queda en duda es si con este llenado de la presa alcanza agua para el Área Metropolitana de Guadalajara, algo que además de los abucheos dejaron a un gobernador molesto e incómodo.